El fin de semana del 4 de julio de 1947, cuatro mil motoristas proscritos, conducidos por los “Boozefighters”, toman la ciudad de Hollister en California. Los dos días de cerveza y peleas que allí transcurren, se convierten en la principal excusa para la formación de la famosa banda de los Angeles del infierno.
La mítica película “The Wild One” (El salvaje), dirigida por Laszlo Benedek, padre de las películas de bikers, sirvió para revivir en los años cincuenta, aquel fin de semana tan relevante para la historia de los bikers. Un joven rebelde vestido con cuero negro y mirada cínica, conduce una Triumph 6T Thunderbird por las calles de Wrightsville. Es Johnny, líder oficioso de los bikers que rondaban por las calles de aquella pequeña ciudad. Laszlo Benedek escoge a Marlon Brando para interpretar el papel de Johnny. En la película interviene un elemento muy importante, una Triumph Thunderbird 6T. Lo curioso de la historia, es que la moto que montaba Marlon Brando no formaba parte del material de producción, era su propia moto. Marlon Brando había insistido en usarla para el rodaje, fue una de sus condiciones.
Las motos inglesas tambien colonizan america
Las motos británicas empezaron a hacer incursiones significativas en el mercado americano, después de la II Guerra Mundial. Triumph era en aquel momento la marca con más posibilidades de conquistar dicho mercado. De hecho, después de 1950 fue cuando se vendieron más Triumph’s en Estados Unidos.
En 1953, un joven y osado piloto de tan solo 18 años, llamado Tommy Smith, se lanza sobre una Thunderbird, a gran velocidad por el lago salado de Bonneville en Utah. Como indumentaria tan solo lleva un bañador, con la brillante idea de ofrecer la mínima resistencia al aire. Consiguió llegar a las 130 mph., pero con la agravante de sufrir una tremenda caída que le produciría importantes quemaduras. Cosa que le conllevarían una serie de injertos de piel y dos años de convalecencia. Este acontecimiento y sobre todo la película “El Salvaje”, servirían a Triumph para aumentar su renombre internacional.
En 1953, año de fabricación de las primeras Thunderbird, solo se entregaban a los concesionarios en color azul. Pero para el mercado americano, el importador encargo a Triumph que se las entregase en color negro. Ya se sabe, los gustos al otro lado del charco no son los mismos, aún en nuestros días se siguen produciendo modelos específicos para los USA.Por este motivo la Thunderbird de Marlon Brando era de color negro. En la actualidad la unidad que perteneció a este famoso actor, es propiedad de Dick Brown y se encuentra en Ashville (Ohio). Ocasionalmente se exhibe en alguna de las salas del museo de la AMA en Pickerington (Ohio). La Triumph Thunderbird 6T de Jon Ivory, que por cierto, no tiene nada que ver con el personaje de la película, es de color azul. Lo cual evidencia su procedencia, Inglaterra.
El estado de conservación de esta moto es casi perfecto y eso que fue fabricada en noviembre de 1952, lo suyo le habrá costado a Jon. Cada moto es un mundo, y esta Triumph no iba a ser menos. Una estética peculiar que expresa elegancia y estilo. En la fabrica de Meriden, se fabricaron una buena cantidad de modelos. Y cada uno de ellos con su propia personalidad. El nombre de Thunderbird 6T seguro que no es tan famoso como el de Marlon Brando, pero si que tiene su propio atractivo, puede que sea por el color azul, que le da un toque diferente. Este color era poco utilizado en las motos de los cincuenta. Y en el caso de la Thunderbird 6T este aspecto se hace notar más, dado que el chasis, tambores de freno y una franja que recorre el centro de las llantas, también están acabadas en el mismo color. Una moto con el clásico atractivo ingles, pero en este caso con una diferencia estética destacada.
A la caza de las 60 mph
Motor bicilindrico con 650 cc., cuatro velocidades, chasis rígido, dinamo (magneto); son algunas de las características principales de la 6T Thunderbird. De entre las diferentes partes de la moto, hay una que me llamó especialmente la atención, fue el conjunto faro relojes, conocido popularmente en nuestro país como “cabeza de hormiga”. Si que es verdad que muchas otras marcas también adoptaron esta solución formal para el conjunto óptico delantero, pero en este caso el resultado final es más que sugestivo. Un enorme velocímetro, con un curioso y “peligroso” (si no haces el calculo rápido...) sistema para calcular de una manera aproximada el numero de revoluciones a que gira el motor, predomina sobre la enorme carcasa del faro. A su lado el mando de las luces, el amperímetro y la rueda de apriete de la dirección. El manillar asoma por dos agujeros de una manera curiosa, quedando escondida la sujeción a la tija. Sobre el deposito, el típico “transporting” de la época. En la Thunderbird, los detalles estéticos fueron meticulosamente cuidados. Los embellecedores cromados del faro y el tanque de gasolina, realzan el celeste de la carrocería. Por el lado derecho de la moto, la caja de herramientas y el deposito de aceite encajados en la triangulación del chasis, forman un bonito conjunto.
Realmente los chasis rígidos, no sé por que, pero me gustan bastante más. Quizás sea por que dejan a la vista el entramado de tubos. En la Thunderbird 6T, vale la pena fijarse en el cubo que esconde el “sprung hub”, es de un diseño curioso.
El twin paralelo de 650 cc., 34 cv a 6.300 rpm y 4 velocidades, fue uno de los motores más utilizados en las cadenas de montaje de Triumph. Entre sus características más destacadas esta la caja de cambios separada. Un sistema muy utilizado en aquellos años y que aventajaba a los demás motores por la razón que minimizaba bastante los costes de reparación. Llegó a propulsar todas las versiones de la Thunderbir fabricadas en Meriden, desde 1949 a 1966: la 6T, 6T AC (rigid frame), 6T M (magneto) y 6T SA (swihg arm).
The Sprung Hub
Una de las partes más destacables de la Thunderbird, es su chasis rígido. Precisamente es lo que más le atrae a su dueño. Puede que Marlon Brando y Lee Marvin opinaran del mismo modo. Este chasis rígido es igual al de la mayoría de las motos de aquella época, a no ser que clavemos nuestra mirada en el tambor trasero, tiene algo diferente. Es el sistema de suspensión “sprung hub”. El invento se atribuye a Edward Turner, que estaba convencido de la necesidad de aplicar recorrido a la rueda trasera, su sistema conseguiría una mayor estabilidad y comodidad para las Triumph. Las ventajas del “sprung hub” eran tales, que la mayoría de los chasis rígidos se adaptarían a él. Pero además todo aquel que quisiera montarlo opcionalmente a su moto podía hacerlo con relativa facilidad.
La descripción del invento no es fácil, pero lo intentaremos. El eje se apoya sobre dos pequeños muelles, con sus correspondientes topes de goma, dispuestos verticalmente. Uno superior y otro inferior, que actúan directamente sobre el eje de la rueda quedando este en medio de los dos. Para contrarrestar el rozamiento, unas pastillas de “ferodo” sirven de pared de fricción por donde se desliza el eje de la rueda. El recorrido del eje de la rueda trasera no es precisamente largo, pero cumple su función. De tenerlo a no tenerlo, se nota. Como dato curioso, este sistema de suspensión fue recuperado a mediados de los noventa por una empresa española (UTIL-MAT), para equipar las Harley-Davidson de chasis rígido que por aquel entonces tanto estaban de moda. Y es que la estética de estos chasis cautiva.
via:Motos de ayer